HONGOS
Los hongos no son plantas ni animales,
aunque se parezcan en algunas de sus características tanto a las unas como a
los otros. A las plantas, por ser organismos sedentarios que se encuentran
fijos a un sustrato y, mientras están vivos, no cesan de crecer. A los
animales, pues, aunque las células de los hongos poseen pared como las de
las plantas, las paredes celulares fúngicas son ricas en quitina, la misma
sustancia que hace duro el esqueleto externo de los insectos.
En
realidad, los organismos que conocemos como hongos tienen diferentes orígenes
en el árbol de la vida, razón por la cual se distribuyen en tres distintos reinos.
La mayoría, los más familiares y reconocibles, conforman el reino de los hongos
verdaderos (Fungi o Eumycota). Otros se ubican en el mismo reino de las amebas,
el llamado Protozoa, como es el caso de los hongos mucilaginosos; y otros más,
entre los que se cuentan ciertos mohos acuáticos que parasitan peces, comparten un tercer reino, el denominado Chromista, con
las diatomeas, esas particulares algas microscópicas de curiosa simetría.
Se
estima que existe más de un millón de especies de hongos en el planeta, pero
tan sólo unas 70,000 de ellas han sido descritas por los especialistas, lo cual
hace evidente la necesidad de contar con más científicos (micólogos o
micetólogos) que estudien estos organismos. Mientras tanto, muchas especies de
hongos se han extinguido y otras se encuentran amenazadas en todo el mundo.
Esto es particularmente cierto en países tropicales ricos en diversidad
biológica como Colombia.
Los hongos tienen distintos hábitos de vida. Los hongos saprófitos, es decir descomponedores de materia orgánica, cumplen una función ecológica de la mayor relevancia pues garantizan el reciclaje de la materia muerta y, por lo tanto, la recirculación de sustancias nutritivas en los ecosistemas.
Los hongos tienen distintos hábitos de vida. Los hongos saprófitos, es decir descomponedores de materia orgánica, cumplen una función ecológica de la mayor relevancia pues garantizan el reciclaje de la materia muerta y, por lo tanto, la recirculación de sustancias nutritivas en los ecosistemas.
Los
hongos parásitos, que viven sobre o dentro de otros seres vivos, obtienen su
alimento de éstos y llegan a producir enfermedad en su hospedero. Los hongos
simbiontes que se asocian de manera mutualista con otros organismos constituyen
alianzas vivas de beneficio mutuo como por ejemplo los líquenes (asociación de
hongo y alga) y las micorrizas (asociación de hongo y raíz de una planta),
simbiosis estas de gran importancia en la naturaleza enprocesos de
colonización de hábitats y de circulación de nutrientes.
Desde
la perspectiva económica, los hongos ofrecen múltiples servicios, pues se utilizan como alimentos,
levaduras de la masa de pan, fermentadores en la producción de
vino y cerveza,
en la maduración de quesos y en el control biológico de plagas agrícolas. Además,
como fuentes de
sustancias que por su actividad biológica pueden ser de enorme utilidad en medicina y en la
bioindustria (eg. antibióticos) y como agentes para estimular el desarrollode las plantas (hongos formadores de micorriza). Sin
embargo, también son dañinos cuando actúan como parásitos de plantas y animales
o cuando estropean estructuras de madera, alimentos almacenados, libros y hasta
obras de arte,
amén de ser peligrosos si, por desconocimiento, se consumen aquellos que tienen principios tóxicos o alucinógenos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario